El delantero estadounidense, el traspaso más caro de la MLS, nunca terminó de encajar en el 'Submarino', por lo que decidió aceptar la oferta del AZ Alkmaar.
Los numerosos récords de precocidad batidos por el delantero estadounidense Jozy Altidore hicieron pensar en un primer momento que podíamos estar ante el sucesor de Landon Donovan como gran estandarte del fútbol de las barras y estrellas. Entre otros logros, Altidore posee el honor de ser el goleador más joven de la historia de la MLS, anotando para los New York Red Bulls con solo 16 años. Su proyección internacional se disparó con su primera convocatoria (a los 17) con la selección de Estados Unidos.
Muchos equipos se fijaron entonces en Altidore, aunque ninguno corrió el riesgo que asumió el Villarreal al pagar cerca de 8 millones de euros por su traspaso, el más caro de la MLS (prácticamente doblando al anterior, el de Clint Dempsey por el Fulham). El Submarino suele tener buen ojo firmando 'perlas' y no había motivos para creer que Altidore no triunfaría en El Madrigal... máxime cuando en noviembre de 2008, en San Mamés, se convirtió en el primer estadounidense (Giuseppe Rossi tiene la nacionalidad italiana) en marcar un gol en la Liga.
Sin embargo, sus apariciones eran demasiado esporádicas, irregulares, y el Villarreal, temeroso de que se estancara, decidió cederle en el mercado de invierno al Xerez. Una lesión dificultó su adaptación a un equipo que, además, había metido la directa hacia Primera División y no necesitaba tocar nada, menos en ataque. El resultado: No jugó ni un minuto en Chapín.
Al año siguiente el Submarino dobló la apuesta, pero esta vez cediéndolo al Hull City, tal vez pensando que la cultura española era demasiado novedosa para el atacante y que su proceso de adaptación a Europa sería más sencillo en Inglaterra. Altidore dispuso de muchas oportunidades con los tigers pero no correspondió con goles, firmando únicamente un tanto en la Premier y otro en la Cup en todo el curso.
El Villarreal cambió de estrategia la temporada pasada, tercera de Altidore en el club, y lo dejó en el primer equipo, aunque Juan Carlos Garrido apenas le utilizó. En el último día del mercado de invierno, casi a la desesperada, se probó con una nueva cesión hasta final de temporada al Bursaspor turco, una especie de 'ultimátum' que no surtió efecto. Altidore tampoco rindió en Turquía.
Así las cosas, al Villarreal solo le quedaba una salida, vender al jugador antes de que su contrato expirase y no se pudiera salvar ni un euro de los casi 8 millones invertidos en su fichaje. La mejor oferta llegó a mediados del pasado mes de julio, procedente del AZ Alkmaar holandés, que se hizo con sus servicios a cambio de, aproximadamente, 1.5 millones. De todos modos, Atidore todavía tiene ¡solo 21 años! y unas condiciones físicas ideales. Evidentemente, aún podría estallar. Pero para el Villarreal, su compra siempre contará como un mal negocio.
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